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¿Cómo prevenir un esguince de tobillo?

  • Escrito por Legado 2.0
  • ¿Conoces los grados de esguince de tobillo? Te ayudamos a identificarlos.

 

  • Utilizar el calzado adecuado puede reducir las probabilidades de que ocurra una lesión.

 

¿Sabías que el esguince más común es el de tobillo? Así como los atletas, todos podemos sufrir una lesión y es importante darle los cuidados necesarios para evitar que se vuelva crónico. Pero ¿sabes qué es un esguince? Se produce cuando se desgarra o se extiende demasiado un ligamento y esto causa dolor, inflamación y que tus movimientos se vean limitados.



Existen tres grados de esguince:



Primer grado – Es considerado como leve y es el desgarre parcial de un ligamento sin perder la capacidad de sostener el peso del cuerpo.


Segundo grado – Es considerado como moderado y es el desgarre incompleto de un ligamento con la pérdida parcial de sostener el peso sobre el pie lesionado.


Tercer grado – Es considerado como grave y es el desgarre total de un ligamento y es imposible soportar el peso sobre el pie lesionado.



“Un esguince quiere decir que esa articulación ha tenido una lesión en sus ligamentos y para poner en perspectiva que tan importante puede llegar a ser un esguince de tobillo, hay que saber que cuando un jugador de futbol se rompe su ligamento cruzado en la rodilla, eso se trata de un esguince de rodilla, así de importante puede llegar a ser también un esguince de tobillo” menciona Dr. Luis Arturo Gómez Carlín, especialista en ortopedia y traumatología de Medyarthros Surgery Center.



Por esta razón, te compartimos tres recomendaciones para tener unos tobillos sanos y fuertes.



Calentamiento previo a la actividad física
Si eres de las personas que les gusta hacer ejercicio, realiza un calentamiento previo para mantener los músculos calientes, aflojar las articulaciones y aumentar la elasticidad muscular. De esta manera, podemos prevenir las lesiones ocasionadas por la rigidez. Asimismo, te recomendamos realizar un par de estiramientos al concluir tu rutina para ayudar a que los músculos contraídos vuelvan a su estado natural.



Utiliza el calzado adecuado
Es imposible eliminar el riesgo de una lesión en el tobillo, pero podemos reducir las probabilidades al utilizar el calzado correcto para tener estabilidad y el equilibrio correcto. Te recomendamos asegurarte que tus zapatos sean cómodos, ergonómicos y adecuados a la actividad que realices, además, evita caminar por superficies irregulares y ser muy cuidadoso al bajar escalones y banquetas.



Hazle caso a tu cuerpo
Las lesiones como los esguinces de tobillo pueden ser confundidas con una simple torcedura y no atenderlo correctamente, por ello, es importante escuchar al cuerpo y no aguantarnos el dolor, ya que podría tornarse a una situación más crónica. Lo correcto es acudir a recibir atención médica para que evalúen tu lesión y la puedan tratar a tiempo.



Sabemos que la prevención es la clave para evitar lesiones futuras y es de vital importancia escuchar a nuestro cuerpo, brindarle los cuidados necesarios, mantener una alimentación saludable y una adecuada hidratación. Recuerda que los tobillos son nuestro soporte principal y hay que darles la atención que merecen.

 

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